es indecente la forma de vida y las ciudades que hemos construido y lo es también que no creamos que podamos cambiarlo y pensar que no existe otro sistema y forma que no nos haga ser esclavo de la depresión y la miseria que nosotros mismos producimos. adormecidos seguimos alimentando cada mañana a las seis esta podrida mentira que nos garantiza un olvido eterno.
os invito a reflexionar sobre esto. si de verdad vives donde y cómo quieres independientemente de cuánto tenga y quién te rodea.
hemos sabido construir una ratonera a nivel mundial y nos hemos introducido narcotizados en ella. para colmo pensamos que así es la vida y que así son las cosas.
que dios nos ayude. nosotros no servimos para nada. cuanto más alto más tonto.